//FECHA DEL SUCESO: 04/OCTUBRE/2011//
Lucha de clases?
El otro día terminaba de ver NO. 6, una
serie que no me había enganchado por completo con su primer episodio,
aunque si lo vi bastante correcto, no tenía el gancho necesario para
generarme suficiente interés. Aun así seguí la serie para ver que tal,
porque mal no la encontré y le hice el aguante a BONES, y al final del
día puedo decir que fue una serie correcta, pero no de lo mejor, dado
que un par de aspectos de la misma hicieron que la totalidad se viera
sin fuerza, lenta en desarrollo y apresurada en el final, lo que no
permitió dar un cierre que se sintiera como tal, sino más bien una
excusa para poder terminar la obra.
Pero vamos desde el comienzo.
NO. 6 nos presenta un futuro post
apocalíptico donde la humanidad se pudo reponer después de una guerra
que devasto todo el planeta. Logrando levantar seis ciudades estado a lo
largo del planeta en lugares donde se podía volver a empezar a crecer
como civilización, teníamos lo que podría ser una pseudo utopía, pero
como toda utopía de ficción, nada es lo que parece. La historia se
centra en NO. 6, una de las ciudades estados que hay en el planeta.
Nuestros protagonistas son Sion y Nezumi, el primero siendo un clásico
habitante de NO. 6, y Nezumi un fugitivo de la ley. El primer encuentro
de los dos se da cuando Sion cumple doce años y en esa misma noche ayuda
a un herido Nezumi, quien era perseguido por las autoridades. Por esta
razón le quitan todos los privilegios a Sion y su madre, y ambos pasan a
vivir en el lado más simple de la ciudad, aun así no está nada mal su
situación, pero Sion pierde la oportunidad de seguir estudiando en las
mejores escuelas, cosa que le hubiera beneficiado dado que tenía un
intelecto bastante elevado. Cuatro años más tarde se vuelve a encontrar
con Nezumi, después de que es arrestado por comenzar a dudar, tras una
serie de incidentes que se dan en NO. 6, del estado utópico de la
ciudad. Nezumi rescata a Sion y le muestra como es afuera de la ciudad,
donde la gente vive de la forma más precaria y desde ahí Sion comienza a
ver lo que en realidad es NO. 6 y lo que cuesta mantener su utopía, así
como la conspiración que se desenvuelve entre sus sombras.
Eso es a líneas generales el planteo de la serie, para después volcarse
en el desarrollo de la relación entre Sion y Nezumi, al tiempo que se va
descubriendo los diversos secretos de NO. 6. En esta relación tenemos
los dos polos opuestos, Sion como el inocente soñador, y Nezumi como el
pesimista realista; se van presentando algunos personajes más, pero
estos no llegan a desarrollarse lo suficiente como para tenerlos en
cuenta, salvo, y hasta ahí nomás, por Inukashi, la pibita que tiene un
hotel y muchos perros, o Safu, la enamorada de Shion, y de última Karan,
la madre de Shion. Aun así, NO. 6 realmente se siente que es una
adaptación de una obra inconclusa, y sin un lineamiento general de cómo
resolver este aspecto, y si a eso le sumamos que la historia avanza
lenta, solo se puede mantener a flote por un excelente nivel técnico y
algunos momentos que le dan cierto levante a la serie, pero que después
quedan colgados dado que no llegan a una explicación de los mismos o a
un desarrollo más profundo de estos.
A lo que me refiero es que con una extensión de 11 episodios la serie
trata de abarcar mucho y se queda corto con todo. La relación entre
Sion y Nezumi se hace muy superficial y simple, sin muchos secretos,
sin muchas vueltas o sorpresas. Las tramas de los demás personajes ni se
tocan, y si se da algún guiño a algo más en la vida de estos, no pasa a
más y se queda en guiño nomas, cosa que se hace que se sienta que todo
fue al vicio porque no sirvió ni para profundizar al personaje. Ni que
hablar del secreto de NO. 6, la conspiración que envuelve todo, la
amenaza a la ciudad y el pasado de Nezumi y su relación con todo esto,
tópicos que se tratan muy débilmente y no se exploran de forma correcta.
Por ahí la simplificación de estos hubiera aportado a la serie en
cuanto al hecho de no tener que necesitar más explicaciones, las cuales
se piden a gritos hacia el final de la serie, como para darle a todo un
sentido más profundo y general.
El mundo también es otro que se siente explorado muy superficialmente,
las descripciones son bastante simples, la ciudad utópica con un secreto
oscuro y el exterior desolado y en ruinas, pero no se extiende más, no
tenemos detalles que hagan de este mundo algo más que un estereotipo
gastado. Por ahí la pretensión de la serie de darle protagonismo a la
relación entre Sion y Nezumi hizo que se perdiera tiempo que podría
haberse usado para extender los demás conceptos, que claramente deberían
haberse minimizado dada la extensión de episodios, para así poder darle
más detalle y profundidad a estos. O de última, minimizar todos los
conceptos, simplificarlos y darle profundidad a la relación entre Sion y
Nezumi, y hacer de esto una historia romántica, pero no tratar de
abarcar los dos extremos y quedarse al medio con sabor a poco.
Ahora bien, la serie tiene sus momentos, eso es innegable (el final es
particularmente agradable), pero estos se sienten diluidos al lado de
todo el resto del conjunto y no son lo suficientemente fuertes para
levantar a la serie. Por el apartado técnico, en cambio, tenemos un gran
trabajo. Un diseño agradable, y una animación excelente, característico
de BONES, los backgrounds son geniales, y la música es acorde a la
serie (aunque personalmente no me agrada el estilo). Por el lado de la
narrativa, ya lo aclare antes, por momentos la serie se siente pesada y
densa, como que no pasa nada, o lo que pasa no es lo suficientemente
interesante como para que valga el tiempo que se le da.
En definitiva, NO. 6 fue una serie que empezó bastante simple, con una
premisa típica en cuanto al mundo y al romance planteado, y no pudo
lograr tener una identidad propia en ningún momento, no pudo concretar
de forma contundente lo que se propuso y se desvivió en un desarrollo
lento durante la casi totalidad de la serie, para apresurarse de golpe
hacia el final, en busca de un cierre más o menos estable al todo
presentado.
Si me preguntan si la recomiendo, sinceramente diría que
no, hay cosas mejores en el género (conspiraciones, boys love, lo que
fuera), aunque no estoy ajeno de que la serie puede llegar a tener
seguidores y ser del agrado de muchas personas.
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